Dentro de mí

¿Qué estás haciendo?
Sientes el miedo de estar perdido en calles que no existen y sin mapa para encontrarte. 
Te ahogas en aguas invisibles y te hundes bajo el peso de tus propios hombros. 
Hacia abajo. 
Cada vez más abajo. 
Lágrimas luchan por salir ante tu refreno de conservar tu dignidad.
El aire pesa cada vez más en tu pecho.
Y tan sólo te arrastras para encontrar una salida. Una salida al qué, al cómo, al quién y al por qué...

Dónde estoy. No me encuentro. 
Me pierdo.
El miedo me amenaza. Los cambios asustan. Todo se relaciona.
El tiempo corre. Demasiado.
Demasiadas cosas que hacer. Demasiado tiempo gastado.
Sueños borrosos. Sueños superpuestos por la avaricia, el amor, el agradecimiento, ...
Grandes decisiones vienen.
No puedo escapar. No hay salida. Tengo que cambiar. 
El miedo acecha. 
Necesito respirar. Necesito volar. El miedo me retiene. Me ata.
Quiero correr. Huir. Llegar a aquel lugar donde todo es posible juntar familia y sueños, amor y cercanía, distancia y el hogar.
El Futuro es incierto. El tiempo corre. Lágrimas brotan. La música llega. 
Necesito...
Necesito.